•❥ ❥• Capítulo 76: ¿Podría ser una trampa de miel?•❥ ❥•
¿Cuál es su objetivo?
Hacia la noche,
incluso los guardianes oscuros descubrieron que Lord Wen y Xiao Wu salieron a
caminar y salvaron a una doncella que huía de los bandidos. Y luego con
entusiasmo fueron a visitarla para expresarle su apoyo.
—¡Ayoo! ¿qué hace
tal multitud de hombres aquí? —la
tía que estaba cuidando a la mujer de amarillo, acababa de salir con agua
caliente y vio a una pandilla de guardianes oscuros corriendo hacia ella —¡Fuera
de aquí! ¡rápido!
«Aunque se trata
de una chica que se ha perdido, vive temporalmente aquí y esta habitación puede
considerarse el dormitorio de una dama. ¿Cómo puedo dejar que los hombres deambulen
por aquí como en casa?»
«¡Solo queríamos expresarle
nuestro apoyo!» Los
guardianes oscuros se sintieron ofendidos porque fueron expulsados, así que retrocedieron
lentamente.
Afortunadamente,
más tarde, después de que todos habían comido, llegó un sirviente y les informó
que la mujer que habían rescatado antes se había despertado.
—Vamos —Wen Liunian se puso de pie— hay que ir a verla.
—Yo también iré —dijo Hua Tang— al menos era una mujer, podía estar
allí.
Los demás también
lo siguieron en una multitud impresionante.
—Estamos aquí de nuevo —al entrar al patio, los guardianes oscuros
miraron a la tía con miradas cálidas y beatífica.
La tía:
—…
En la habitación,
una mujer de amarillo estaba sentada apoyada en la cabecera de la cama,
bebiendo agua. Al ver entrar a Wen Liunian, se levantó para saludarlo, pero Hua
Tang la detuvo.
—No se necesita ninguna ceremonia.
Acuéstese, descanse.
—Gracias —asintió la mujer.
Wen Liunian se
sentó en la silla junto a la cama.
Toda una multitud
de personas se apretujó justo detrás de él, y pronto la sala se llenó de gente.
La mujer de
amarillo estaba un poco asustada.
«¿Dónde salió… tanta gente?»
Los guardianes
oscuros eran todos sonrisas. Muy hospitalarios.
—No tengas miedo —dijo Wen Liunian— todos son del gobierno.
«Probablemente no
entienda si empiezo a explicarle sobre las sectas del Jianghu, será más fácil
generalizar.»
—¡Sí, sí, sí, todos somos funcionarios
asalariados del Emperador Chu! —al
escucharlo, los guardianes oscuros inmediatamente asintieron con la cabeza.
«¡De repente
tenemos otra identidad, esto es genial!»
La mujer de
amarillo no sabía qué decirle y solo después de mucho tiempo dijo:
—Muchas gracias por salvarme, Su
Excelencia.
—Este es mi deber, no hay necesidad
de ser cortés —dijo Wen Liunian— ¿cómo te sientes?
—Mi cabeza todavía da vueltas un
poco.
Hua Tang revisó
su pulso y dijo:
—Hay algo de debilidad, creo que
tardará un par de semanas en recuperarse.
—Es mucho tiempo —Wen Liunian se frotó la barbilla.
—Su Excelencia —al ver que vacilaba, la mujer
comenzó a llorar de nuevo—
no tengo un techo sobre mi cabeza. Si no le importa, puede dejarme como
sirviente. No necesito dinero, solo necesito un lugar para resguardarme del
viento y la lluvia.
—No te preocupes —dijo Wen Liunian— ¿cómo te llamas?
—Fang Cui —respondió la mujer de amarillo.
—Es un apellido común en Jiangnan —dijo Wen Liunian— no tuve tiempo de preguntarle sobre
esto antes, pero ahora se ha presentado la oportunidad, para que cuente en
detalle lo que le sucedió para que este funcionario te haga justicia.
—Muchas gracias, Su Excelencia —antes de que la mujer pudiera
hablar, comenzó a derramar lágrimas nuevamente, y solo después de mucho tiempo
comenzó a contar la historia—
mi familia es de la ciudad Qifu en cerca del río Qingshui. Hace algún tiempo,
mis padres fallecieron a causa de una enfermedad, y antes de morir, me pidieron
que fuera al noreste con mi tío. Pero no esperaba toparme con bandidos tan
pronto como llegué al acantilado Fengsha. Mataron a todos en el acto y
finalmente me secuestraron, diciendo que me venderían al Reino Luosha en el
norte, donde me convertiría en concubina.
—¿Reino Luosha? —preguntó Wen Liunian.
—Sí.
El prefecto
frunció el ceño ligeramente. Desde que el Gran Chu y los Siete Reinos Absolutos
unieron sus fuerzas para repeler la invasión de gente Luosha hace unos años,
emitieron un edicto que prohibía seguir comerciando con ellos. Nunca ha
escuchado hablar de un oficio como el de vender mujeres del Gran Chu al Reino
Luosha.
—Sí que existe tal cosa —confirmó Zhao Yue, notando que Wen Liunian
parecía un poco confundido—
no se habla mucho al respecto. Quienes se dedican a esto son bandidos infames y
se dice que las mujeres del Chu son populares entre la nobleza del Reino Luosha.
—No puedo creer que esto realmente
esté sucediendo —Wen
Liunian negó con la cabeza, con la intención de escribir una carta a la corte
imperial al día siguiente para asegurarse de fortalecer la guardia fronteriza,
de lo contrario, no se sabe cuántas doncellas de buenas familias se convertirán
en sus víctimas.
—¿Viajaba solo con una caravana mercante
hacia el noreste? —Hua
Tang preguntó de repente.
—También había sirvientes, pero todos
murieron por las espadas de esos criminales —respondió
Fang Cui— mi familia es rica.
—Ya veo —Hua Tang asintió y no dijo nada más.
Wen Liunian hizo
algunas preguntas más y luego, al ver que se veía un poco cansada, le dijo a los
demás que se despidieran para que la mujer pudiera descansar un poco más.
—Su Excelencia —dijo Fang Cui con incertidumbre— ¿puedo quedarme aquí?
—No se apresure a esto —dijo Wen Liunian— primero, debes recuperarte con
calma y el resto se discutirá más adelante.
Fang Cui asintió
y siguió a las personas que salían de la habitación con la mirada.
Al regresar a sus
aposentos, Wen Liunian se sentó a la mesa y se quedó pensativo.
Zhao Yue agitó su
mano frente a su cara.
—¿Te has perdido en tus pensamientos
otra vez?
—… Es un poco
extraño.
—¿Qué exactamente? —Zhao Yue se sentó frente a él.
—La mujer que ayudé hoy.
—Puedes decírmelo —Zhao
Yue le sirvió té.
—Afirma ser de una familia rica en
Jiangnan, pero no actúa como una doncella de una familia aristocrática —dijo Wen Liunian— hoy en las puertas de la ciudad
devoró los bocadillos con mucha… avidez.
—Pero estuvo hambrienta durante un
par de días —recordó Zhao Yue.
—He estado en lugares aledaños al río
Qingshui dos veces. Hay un pueblo de eruditos e incluso los niños de familias
pobres fueron enviados a estudiar y las personas ricas y nobles eran aún más
estrictas en la observancia de la etiqueta. Al tener al menos el doble de
hambre, como una joven de una familia noble, no podría comer como un tigre,
manchando toda su cara con grasa, frente a un par de docenas de personas.
—¿Y sólo es esto? —preguntó Zhao Yue.
—Además, cuando la visitamos, con la
excepción de la guardiana de la izquierda, todos eran hombres. Si fuera una
niña de una familia común, incluso si estuviera completamente vestida, se
cubriría con una manta para que tantos hombres no la vieran —dijo Wen Liunian— y ella no reaccionó en absoluto.
«Tiene los modales
de una mujer de burdel.»
—Ahora entiendo por qué llamaste a
todos y no le advertiste a la tía Wang —dijo
Zhao Yue— anteriormente, se preguntó por qué
una docena de personas se abalanzaron sobre la doncella herida.
—Simplemente decidí echar un vistazo.
Si se sintiera un poco incómoda, les habría pedido a los demás que se fueran,
pero su actitud no cambió ni un poco.
«Así que decidí
dejar que todos se quedaran.»
—Entonces solo hay que estar más
alerta —dijo
Zhao Yue— si está tramando
algo, lo más probable es que fue enviada por la pandilla Tiger’s Head. Sería
una ventaja para nosotros.
«Se han servido
en bandeja de plata, así que hay que aprovechar las pistas.»
—Yo también lo creo —sonrió Wen Liunian.
«Realmente, no
podemos estar más conectados.»
***
Por otro lado, Xiao
Wu también estaba asombrado.
—¿Está fingiendo?
—No estoy completamente segura, pero siento
que hay altas probabilidades que esté mintiendo —Hua Tang enderezó la manta— ella dice que proviene de una familia noble, pero ¿qué
familia noble obligaría a su hija a hacer el trabajo sucio? Además, a juzgar
por la ubicación de los callos en sus manos, se formaron a partir de muchos
años de manejo de la espada.
—Iré y advertiré a Lord Wen —Xiao Wu caminó hacia la puerta.
—Lord Wen también se dio cuenta —Hua Tang se sentó en el borde de la
cama y lo miró.
—¿Es verdad? —Xiao Wu se sorprendió.
—Eres el único lo suficientemente
estúpido como para traerla aquí.
Xiao Wu se
atragantó por un momento.
«¡Yo no sospeché
nada!»
—Hoy, cuando Lord Wen la interrogó,
casi todas las preguntas fueron una trampa —dijo
Hua Tang— comenzó bien, pero a medida que
pasaba el tiempo, sus respuestas estaban más llenas de errores de cálculo.
Supongo que no lo entendiste.
Después de decir
esto, Hua Tang añadió:
—Bueno y el gran jefe Zhao tampoco
entendió.
—…
—Si el maestro no lo reveló, entonces
hay una razón —dijo Hua Tang— sigamos el juego. Si es un “peón”
de la pandilla Tiger’s Head, preguntaremos de nuevo mañana y veremos qué hace.
Xiao Wu asintió.
Al recordar cómo la cargó hoy, se rascó involuntariamente, sintiendo que todo
su cuerpo comenzaba a picar. Deberá ducharse tres veces antes de acostarse.
¡En el futuro,
será mejor meterse menos en este asunto!
El Lobo de
Armadura Roja se posó en la mesa, arrastrándose en círculos, muy abatido.
«No hay nadie con
quien jugar, oh…»
«Es una pena.»
*****
En el otro
extremo del pequeño patio, Wen Liunian yacía perezosamente en la cama,
permitiendo que Zhao Yue le masajeara los hombros.
—¿No quieres dormir? —Zhao Yue preguntó— ¿por qué no cierras los ojos?
Por lo general, el
prefecto se quedaba dormido después de un par de movimientos.
—No quiero.
—Si no quieres dormir, ¿puedo
preguntarte algo? —Los
movimientos de Zhao Yue se detuvieron.
—Por supuesto —Wen Liunian se volvió para mirarlo— ¿qué pregunta?
Zhao Yue se
acostó a su lado.
—Sobre esa mujer de origen
desconocido…
Wen Liunian
entrecerró los ojos.
—Así que piensas en esa mujer.
—No hagas una escena —se rio Zhao Yue— lo digo en serio. Si realmente fue
enviada por una secta demoniaca ¿por qué inventaría una historia tan inverosímil?
—No es tan inverosímil, puede que no
todo el mundo sea capaz de detectarlo —dijo
Wen Liunian.
—También es cierto —Zhao Yue
asintió, habiéndoselo perdido él mismo justo entonces.
—En realidad, no es fácil forjar una
falsa identidad, especialmente cuando el gobierno y las sectas trabajan juntos —dijo Wen Liunian— aunque se considera que el Gran Chu
es un país extenso, la gente personas que estamos aquí hemos viajado de norte a
sur y hemos visto el mundo. Independientemente de la ubicación que diga, existe
la posibilidad de ser descubierta, por lo que tuvo que elegir un lugar con el
que esté más familiarizada.
—Mmm, ya veo…
—También está la historia sobre los
bandidos que querían venderla al Reino Luosha, que esa es la explicación más
razonable. Después de todo, no tiene motivos para estar cerca de la ciudad Cangmang.
—Esta cabeza funciona bastante bien.
—Zhao Yue extendió su mano y tocó en
la cabeza.
—Por supuesto que hace un buen
trabajo —Wen Liunian aceptó el cumplido con
dignidad.
—Duerme —dijo Zhao Yue— En cuanto al propósito de su venida,
lo sabremos con el tiempo.
Wen Liunian cerró
los ojos y volvió a frotarse en sus brazos.
«Vamos a
dormirnos enseguida.»
«Sólo queda una cosa
pendiente»
Zhao Yue lo
abrazó con fuerza e inclinó para besar la parte superior de su cabeza.
«¿Por qué te cambiaste
de posición?» Pensó
Wen Liunian.
Zhao Yue apagó la
lámpara con un movimiento de su mano.
Wen Liunian hizo
un puchero en la oscuridad, luego miró la parte superior oscura de la cama mientras
una lluvia de pensamientos seguía inundando su mente.
«¿Cuándo podremos
acabar con los bandidos?»
«Parece que ya va
siendo hora de casarse.»
«Después de todo,
la ciudad Cangmang está aún muy lejos mi antiguo hogar en Jiangnan y nos
tardaríamos mucho tiempo en ir y volver.
Es importante prepararse con antelación.»
***
Después de unos
días, la salud de Fang Cui mejoró gradualmente y pudo moverse poco a poco. A
menudo iba a trabajar con la tía, no hablaba mucho y parecía bastante honesta.
El resto del
grupo siguió las instrucciones de Wen Liunian y fingió no darse cuenta.
En este día, Zhao
Yue estaba de paso, pero fue detenido por ella.
—Señorita Fan ¿me necesita para algo?
—el gran jefe Zhao se detuvo.
—No es nada
especial —dijo Fang Cui— solo quería preguntar dónde venden colorete
en esta ciudad.
—No lo sé —dijo Zhao Yue— la tía Li se ha ido a quedarse con
su familia durante unos días, puede preguntarle a la guardiana de la izquierda.
—No me atrevería —Fang Cui de repente se volvió tímida.
—¿Por qué? —Zhao Yue sonrió.
—Escuché que es muy feroz.
—¿Escuchaste? ¿De quién? —preguntó Zhao Yue.
Fang Cui miró
hacia el tejado.
Los guardianes
oscuros simplemente hicieron “clic” felizmente con las semillas de melón,
mirando al horizonte.
«¡No dijimos
nada, gran jefe Zhao, no le digas a la guardiana de la izquierda!»
—Lord Zhao ¿puede comprarlos para mí?
—preguntó Fang Cui— no es bueno para mí salir así.
—Claro —Zhao Yue asintió con la cabeza.
—Espere un momento, joven maestro
Zhao —cuando él estuvo de acuerdo, Fang Cui
sonrió de alegría y entró corriendo a su habitación, después de un rato trajo
un brazalete de jade—
esto es todo lo que me queda después del asalto de los bandidos. No tengo dinero,
pero puede empeñar este brazalete.
—Bien —Zhao Yue guardó el brazalete— ¿algo más?
—Nada más, muchas gracias, joven
maestro Zhao.
Fang Cui estaba
un poco sorprendida en su interior, pero no lo mostró en su cara. De acuerdo
con sus pensamientos anteriores, pensó que, con el estilo de un guerrero del
mundo marcial, no importa qué, no querría las cosas de la mujer en apuros, ¡pero
no se imaginó que la otra parte lo daría tan por sentado!
—Te traeré estas cosas cuando las compre
—dijo Zhao Yue.
Fang Cui asintió
y se inclinó cortésmente.
—Muchas gracias, joven maestro.
Zhao Yue regresó
a la oficina y le dio el brazalete a Lord Wen.
—¡Tsk! ¡tsk! —el segundo jefe Lu se preocupaba por
el caos en el mundo. «Ella le entrega un brazalete y él le compra colorete.
Supongo que alguien estará arrodillado en la tabla de lavar esta noche.»
—Gran jefe Zhao, ten
cuidado —advirtió Hua Tang— si realmente se trata de Tiger’s
Head, entonces tú eres su objetivo.
—Dado que ella tomó la iniciativa de buscarme,
debemos seguirle el juego —dijo
Zhao Yue— de esa manera podemos ver cuál será
su última jugada.
—Podría ser una trampa de miel —dijo un guardia oscuro.
«Esta
es una de las treinta y seis estratagemas, a menudo se menciona en el los
cuentos huaben[1].»
El otro guardia
oscuro le dio una patada.
—¡Ella no es una
belleza!
«¡Cómo puedes
decir tal cosa frente a la guardiana de la izquierda! Además, incluso si no es mala,
sigue siendo de la pandilla Tiger’s Head, mezclándose con marionetas salvajes
todos los días es realmente aterradora.»
«Probablemente
sea mejor mantenerse alejado.»
—Gran jefe, en estos días será mejor
que mantenga al Lobo de Armadura Roja con usted para que no sea atacado
por un gu —dijo
Hua Tang— en cuanto a los coloretes, los
prepararé.
—¿Le arruinará la
cara? —preguntó un guardia oscuro, con la
boca abierta, porque eso es algo que haría la guardiana de la izquierdo.
—Es solo colorete común y corriente —dijo Hua Tang después de una pausa.
El guardia
oscuro:
—…
«Lo dije sin
pensar, no te lo tomes a pecho.»
Después de que
los demás se fueron, Wen Liunian miró a los ojos de Zhao Yue.
El gran jefe Zhao
levantó las manos.
—Ni siquiera la miré.
—Oh.
—Si no te gusta, la evitaré —dijo Zhao Yue, indefenso.
—Por supuesto, no es necesario que la
evites —dijo Wen Liunian— no solo no debes evitarla, sino que
también debes engatusarla.
—¿Y si ella quiere seducirme?
—Entonces solo dale un poco de
atención.
Los ojos de Zhao
Yue se abrieron. «¿No este empollón demasiado relajado? ¿Qué quiere decir
con “dale un poco de atención”?»
Wen Liunian
despejó lentamente la mesa.
Zhao Yue tiró de
su oreja.
—¿No sabes que tienes que cuidarme?
«Al menos se casarán
en el futuro, pero ni siquiera le teme a una trampa de "miel".»
Wen Liunian le
lanzó una mirada intensa y preguntó retóricamente:
—Si no te cuido, ¿huirás?
Zhao Yue y él se
miraron por un momento, de repente suspiró.
«Sí, incluso si
no me cuida, todavía no huiré.»
Wen Liunian
continuó:
—No vas a huir de todos modos, así
que ¿por qué debería cuidarte?
El pecho de Zhao
Yue se apretó, pero no pudo decirle nada.
«¡Este empollón
puede ser tan exasperante!»
Wen Liunian lo
miró inocentemente.
Zhao Yue apretó
los dientes. No fue ofensivo, pero es difícil para él no sentirse agraviado.
Así que simplemente lo agarró en sus brazos, lo presionó contra la mesa y lo
besó bruscamente.
El Gran jefe,
simplemente dejó de lado este tema.
La mesa estaba
dura, pero Wen Liunian no lo apartó, sino que incluso tomó la iniciativa de
extender la mano y engancharla alrededor de su cuello.
Al darse cuenta
de lo obediente que era, el corazón de Zhao Yue se sintió más seguro, por lo
que disminuyó la velocidad de sus movimientos, continuó chupando y besando sus
labios.
Wen Liunian cerró
suavemente los ojos, sintiendo cierto deseo desbordarse en su corazón,
ligeramente… excitado.
La piedra de
tinta fue aplastada por el libro que Zhao Yue tiró casualmente, y el Lobo de
Armadura Roja no tenía lugar para correr en círculos, por lo que tuvo que
tumbarse al lado del pergamino, sacudiendo sus antenas y mirando a los dos
hombres, sintiéndose ligeramente desconcertado.
«¿Qué están
haciendo? ¿eh?»
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Glosario:
1. Huaben es un cuento popular urbano chino que surgió de un cuento oral. Y una trampa de miel es una trampa con una belleza como cebo.
