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"No
importa. De todos modos, quiero ver el Anillo de Retorno siete
días", el tono de Sai Pan'an no toleró ninguna objeción.
Nan Moxie
se puso en cuclillas en su silla y refunfuñó descontento.
"¿Este
anciano tiene alguna dificultad?" Preguntó Sai Pan'an.
"Para
crear el Anillo de Retorno, todavía me falta una herramienta", dijo
Nan Moxie.
Sai
Pan'an frunció el ceño: “¿Qué herramienta?”
Nan Moxie
dijo lo que se le ocurría: "¡Wangyue [1]!”
Sai
Pan'an, por supuesto, no entendió: “¿Qué es el wangyue?"
"No
puedo decirlo", dijo misteriosamente Nan Moxie. "Los misterios del
Cielo no deben ser revelados”
Sai
Pan'an forzó su paciencia: “¿Y dónde puedo conseguirlo?”
"¡Solo
déjame ir y lo encontraré!"
"Oh,
no," Sai Pan'an se negó, como era de esperar.
"Entonces
no hay nada que hacer", Nan Moxie negó con la cabeza obstinadamente.
"¡No puedes hacer el Anillo de Retorno sin wangyue, es inútil,
incluso si me matas!"
"Come
esta pastilla", reflexionó Sai Pan'an por un momento, y luego sacó una
pequeña botella de porcelana.
"¡Ah!”
Nan Moxie casi saltó en su silla.
En sus
muchos años de viaje en Jianghu, había visto cientos de formas astutas de
deslizar veneno sobre alguien, pero nunca había visto una forma tan descarada e
impertinente como simplemente sacarlos y pedirles que se los comieran. ‘¿Parezco
un idiota?’
"Si
este anciano insiste tanto en ir solo y sin vigilancia, entonces esta es la
única salida", dijo Sai Pan'an.
Nan Moxie
preguntó con cautela: "¿Es ginseng y astas de ciervo [2]?"
"Son
cinco venenos [3]”.
Nan
Moxie: “……”
"Después
de comer esta píldora, el efecto tardará tres días en aparecer", dijo Sai
Pan'an. "Si este anciano puede regresar a tiempo, le proporcionaré un
antídoto de inmediato. Será beneficioso para ambos.”
"¡De
ninguna manera, no me la voy a comer!" Nan Moxie cerró la boca con fuerza.
Sai
Pan'an le agarró la garganta con una mano, y con la otra, abrió la boca y le
metió una pastilla.
Nan Moxie
tosió desesperadamente
"Le
ruego a este anciano que no se ofenda," dijo Sai Pan'an con frialdad.
Nan Moxie
derramó lágrimas en los ojos involuntariamente, ‘Si no estoy ofendido,
entonces estás viendo un fantasma ahora. ¡Después de esto, destruiré a toda tu
familia!’
"Este
anciano puede irse.”
Nan Moxie
se sentía muy infeliz: "¿Me darás algo de dinero?"
Sai
Pan'an se congeló al principio, pero finalmente sacó un lingote de plata.
"No
es suficiente.”
Sai
Pan'an añadió otro lingote de plata.
"¡Mil
liangs, nada menos!" Dijo Nan Moxie.
Sai
Pan'an se quedó helado de asombro.
"En
oro", continuó Nan Moxie.
Las
venas de la frente de Sai Pan'an se hincharon: “Has cambiado mucho después de
varias décadas.”
"Todos
cambian", Nan Moxie se limpió la nariz. "Sin hijos e hijas, tengo que
ahorrar para mi vejez.”
Sai
Pan'an arrojó un montón de lingotes frente a él.
‘Así
es, de lo contrario habría venido por nada.’
Nan Moxie
dobló con cuidado los billetes, se los metió en las mangas y salió de la
posada.
Después
de buscar en innumerables callejones, Duan Baiyue finalmente los encontró.
Estaba esperando debajo de un árbol y Duan Yao estaba en cuclillas a su lado.
"¡Shifu!"
Duan Yao se puso de pie y felizmente saltó hacia él.
"No
está mal, puedes reconocer a tu shifu incluso disfrazado", Nan Moxie sacó
los billetes y se los entregó. "Ven aquí, toma este dinero para que te
compres unos dulces".
"¡Muchas
gracias, shifu!" Duan Yao estaba encantado.
"No
me digas que has estado dando vueltas por ahí extorsionando dinero durante todo
este tiempo", dijo Duan Baiyue.
"¡¿Todo
este tiempo?!" Nan Moxie dijo indignado.
‘¡Está
claro que no ha pasado ni una hora!’
Duan
Yao rápidamente tomó su mano: "¡Sin shifu, una hora dura como un
año!"
Nan Moxie
sonrió por todas partes.
“¿Y
entonces?” Preguntó Duan Baiyue.
"Podría
ser que sea el mismo Qiu Ji", respondió Nan Moxie.
"¿Qiu
Ji? ¿Te refieres al mismo Qiu Ji que luchó contra Lan Yizhan durante tres días
y lo mató?” Duan Baiyue frunció el ceño.
Nan Moxie
asintió.
"Pero
eso fue hace más de cincuenta años. Incluso si solo tenían veinte años
entonces, deben estar en sus setenta ahora. Pero mirando las manos de Sai
Pan'an, no se le puede dar más de veinte", dijo Duan Baiyue.
Nan Moxie
le dio una buena palmada en la cabeza.
Duan
Baiyue: “……”
‘¿Qué
más?’
"¿Cómo
puedes pensar que eres de la Mansión del Suroeste?" Nan Moxie suspiró con
tristeza. "Has traído vergüenza sobre la cabeza de tu difunto padre.”
"¿Está
diciendo shifu que Sai Pan'an mantiene su apariencia con guchong?"
Dijo Duan Baiyue. "Pero si realmente es Qiu Ji, entonces tiene que apuntalar
el cielo con la cabeza [4], es un héroe glorificado. ¿Por qué usaría trucos
tan bajos?”
Sin
mencionar que cuando un guchong ingresa al cuerpo, inevitablemente
destruye la salud y el yuanqi [5]. Hacer esto solo para preservar la
apariencia es una locura, incluso las mujeres de las sectas demoníacas no están
tan desesperadas.
“¿Así
que crees que los rumores definen a una persona?” Nan Moxie lo miró.
"Entonces no deberías estar aquí ahora, sino sentarte en un trono en el
Salón Imperial Dorado y glorificar a tus antepasados.”
Duan
Baiyue no tenía nada que decir, estuvo de acuerdo obedientemente: “Shifu tiene
razón”.
"Además,
dijiste que tiene un guchong en su cuerpo, es muy posible que sea él
quien mantenga su apariencia", continuó Nan Moxie. "Ahora, antes de
dejarme ir, me hizo comer una pastilla de cinco venenos.”
Duan
Yao estaba preocupado: "¡¿Shifu, no pudo resistirse a comerlo con
avidez?!"
Nan Moxie
negó con la cabeza: "No, me contuve, me veía extremadamente patético”
Duan
Yao respiró aliviado: “Muy bien, entonces”.
En el
pasado, en la Mansión del Suroeste, Nan Moxie solía comer las cinco píldoras
venenosas como si fueran dulces, y nadie podía detenerlo.
Nan Moxie
continuó preguntando: "Tienes muchos amigos en Jianghu. ¿Has escuchado a
alguien mencionar las cosas extrañas que han estado sucediendo en la Montaña
del Ataúd de Jade últimamente?”
"El
anciano Mu Chi lo mencionó, e incluso envié a un hombre a preguntar. Pero todos
los que fueron interrogados dijeron que todo era como de costumbre en la
montaña. No parece que haya pasado nada allí”.
"Ya
sea que Sai Pan'an sea Qiu Ji o no, de una forma u otra, necesita al anciano Mu
Chi para crear el Anillo de Retorno y explorar la Montaña del Ataúd de
Jade", dijo Nan Moxie. "Para ver si Lan Yizhan ha escapado".
"Lan
Yizhan es un monstruo, y no es inusual que algunas personas lo quieran de
vuelta más que las carpas que cruzan el río [6]", dijo Duan
Baiyue. "Pero no hay nada malo con la Montaña del Ataúd de Jade, y no hay
ningún rumor circulando por Jianghu. ¿Qué le hizo pensar que Lan Yizhan ha
regresado de entre los muertos y escapado?”
Nan Moxie
tosió dos veces: "Por lo que dijo, lo atribuye al saqueo de la Torre de
los Nueve Misterios. Pensó que fue Lan Yizhan quien lo hizo”.
Duan
Baiyue: “……”
Duan
Yao: “……”
‘Venga,
sí.’
"Sabes
qué hacer primero, ¿verdad?" Nan Moxie volvió a preguntar.
Duan
Baiyue lo pensó y dijo: "Investigaré más a fondo, basándome en lo que ya
se sabe. Y también, averiguar de Sai Pan'an, por qué está tan seguro de que fue
Lan Yizhan quien irrumpió en la Torre de los Nueve Misterios, cuál es el
significado de diseñar un tablero de ajedrez con Fenxing y cuál es la conexión
entre la alineación de Fenxing en el go, con la perla de Torre de los
Nueve Misterios.”
La
cabeza de Duan Yao estaba dando vueltas ante lo que escuchó.
"No
importa en absoluto ahora", dijo Nan Moxie. "Lo más importante ahora
es conseguir rápidamente un Anillo de Retorno para este shifu.”
Ni
siquiera sabe lo que es, y mucho menos cómo hacerlo. ¿Y si queda expuesto?
"Mañana
por la noche, lo enviaré a esta posada en nombre de shifu", dijo Duan
Baiyue.
Nan Moxie
asintió y se volvió hacia Duan Yao: "¿Está tu sapo púrpura contigo
ahora?"
“Sí,
lo tengo conmigo.”
"Préstamelo
por unos días", dijo Nan Moxie, acariciando su bigote ominosamente.
En el
palacio, Chu Yuan finalmente había terminado su trabajo. El eunuco Sixi recordó
vívidamente: "Emperador, es hora de cenar".
"Espera
un poco más", Chu Yuan tomó otro libro sin siquiera levantar la cabeza.
En su
corazón, Sixi se sintió ansioso y volvió a mirar hacia afuera con ansiedad.
¿Por qué aún no ha venido el Rey del Suroeste? El Emperador seguía esperándole.
Tenía que irse a la cama pronto y aún no había cenado.
Aproximadamente
una hora después, se escuchó un trueno en la distancia, señalando la proximidad
de una fuerte lluvia.
"Aparentemente,
el Rey del Suroeste no vendrá hoy", pensó Sixi para sí mismo.
Chu
Yuan también frunció el ceño y se puso de pie, mirando por la ventana.
“Majestad”
el eunuco Sixi decidió intentarlo de nuevo. "¿Este sirviente tiene que
servir comida?"
Chu
Yuan negó con la cabeza: "No tienes que hacerlo hoy”.
Sixi:
“…”
¿Qué
quiere decir con "no tengo que hacerlo hoy"? ¿Qué pasa, si el Rey
Duan no está allí, entonces ni siquiera quiere comer? Si el Rey Duan regresara
a Yunnan algún día, el emperador perdería peso en tres días.
Chu
Yuan estaba mareado y no tenía apetito en absoluto. Se levantó y estaba a punto
de regresar a sus habitaciones cuando Duan Baiyue de repente saltó al patio,
empapado.
“¡Ah, Rey
Duan!” El eunuco Sixi se estremeció de miedo y abrió apresuradamente la puerta.
"¡Date prisa, entra!"
"Algo
sucedió en el camino hacia aquí, me detuvieron", Duan Baiyue se limpió el
agua de la cara.
Chu
Yuan le entregó un pañuelo.
“¿Sabías
que iba a venir?” Preguntó Duan Baiyue. "No me encontré con muchos
guardias cuando venía hacia ti”.
"El
anciano Mu Chi regresó hoy y me dijo que se encontró con Duan Nian en las
calles y que parecía que algo había sucedido allí”.
"Es
una larga historia", dijo Duan Baiyue. “¿Volvemos a los dormitorios?”
Mientras
tanto, Chu Yuan asintió, instruyendo a Sixi para que preparara sopa de jengibre
para evitar resfriarse.
"Soy
un practicante de artes marciales, ¿qué podría hacerme esta lluvia?” Duan
Baiyue se rio.
El
eunuco Sixi suspiró en su mente: ‘¿El Rey Duan ni siquiera sabe cómo fingir
estar enfermo? Si siempre está tan sano, entonces nadie lo cuidará, incluso
cuando él quiera.’
Junto
con la sopa de jengibre hirviendo, se preparó agua tibia para bañarse, y un
poco más tarde se planeó servir la cena.
El
eunuco Sixi sonrió con satisfacción y asintió.
Los
otros sirvientes se preguntaban por qué el Emperador siempre se había quedado
en sus habitaciones en los últimos días, comiendo y bañándose allí, sin
siquiera mostrarse detrás de la puerta.
Detrás
de la pantalla, había una salpicadura de agua. Chu Yuan, reclinado sobre la
mesa, apoyó la cabeza en las manos y se perdió en sus pensamientos. Duan
Baiyue, que había terminado de bañarse, se limpió el cabello y lo vio así, y no
pudo evitar reírse.
"¿Qué
pasa, Tao Rende te estaba molestando de nuevo?"
Chu
Yuan levantó la cabeza y frunció el ceño: "Ponte la ropa".
"Está
toda mojada", Duan Baiyue, vestido solo con su ropa interior, se sentó a
su lado. "¿Tienes uno nuevo?"
Chu
Yuan hizo una pausa: "¿Por qué debería haber ropa nueva para ti en el
palacio?"
Duan
Baiyue se encogió de hombros: "Mira, me gustaría vestirme, pero no tienes.”
Chu
Yuan: “……”
“¿Estas
agotado?” Preguntó Duan Baiyue, al ver que todavía estaba acostado sobre la
mesa. "Entonces vete a la cama temprano, te contaré todo mañana".
"La
cena aún no se ha servido", dijo Chu Yuan.
"¿Por
qué aun no has cenado?" Duan Baiyue frunció el ceño.
Chu
Yuan bostezó, sin querer moverse ni un centímetro.
Duan
Baiyue se sentó más cerca: "¿Por qué no te ausentas de reunión de la corte
mañana por la mañana?"
"No,
no lo haré”.
Duan
Baiyue dijo: "Dormirás perezosamente todo el día y te daré un regalo".
"No
quiero”.
Duan
Baiyue tomó su mano con firmeza, se la llevó a los labios y la besó suavemente.
"Te
arrastraré al patio y te decapitaré", dijo Chu Yuan perezosamente.
Duan
Baiyue se rio: "Si lo hubiera sabido de antemano, habría hecho algo más
sustancial, de lo contrario no habría perdido”.
"¡Atrevido!"
Chu Yuan finalmente se enderezó, sintiendo un poco de hambre.
Sixi
sirvió la cena muy rápidamente. Sin embargo, estos ya no eran los platos
habituales, cuando la mitad de ellos eran carne y la otra mitad eran verduras.
Ahora toda la mesa estaba ocupada por el estilo de cocina del Suroeste.
Duan
Baiyue miró estos platos con sorpresa.
"Todo
esto fue enviado por la Mansión del Suroeste", dijo Chu Yuan.
"Envié
esto para que pudieras diversificar el sabor de la comida, no dije que se
debería comer de una sola vez", dijo Duan Baiyue. "La cocina del
Suroeste es más agria y picante, no podrás comerla”.
“¿En
serio?” Chu Yuan tomó una cucharada de sopa.
"Te
dije que era demasiado picante", Duan Baiyue le quitó la cuchara.
"En
ese caso, ¿esta comida no se comerá?" Chu Yuan quería reírse.
"Come
esto", Duan Baiyue le llevó una cucharada de arroz a los labios. "Es
dulce”.
Chu
Yuan lo masticó bien y se lo tragó: "Resulta que creciste comiendo flores”.
Duan
Baiyue: “……”
"Quiero
comer algo picante que se suele comer en la Mansión del Suroeste”.
Duan
Baiyue solo tuvo que mezclar un tazón pequeño de pescado para él, agregándole
especias y semillas de sésamo tostadas. "Solo un poquito”.
Chu
Yuan probó la mitad de la cuchara y su expresión cambió como se esperaba.
Duan
Baiyue llevó la palma de la mano a su boca: "Escúpelo".
Chu
Yuan tragó saliva con esfuerzo, luego agarró la tetera y bebió durante mucho
tiempo.
Duan
Baiyue: “……”
La
cara de Chu Yuan estaba roja y el sudor apareció en su frente.
Duan
Baiyue lo miró: "¿Me arrastrarán de nuevo al patio y me decapitarán?"
Chu
Yuan tiró de un tazón de arroz glutinoso dulce hacia él: "Te dejaré el
resto a ti".
Duan
Baiyue llamó a Sixi y le indicó que preparara algunos otros platos más ligeros.
Luego,
Chu Yuan se sentó aferrándose a su tazón y vio a Duan Baiyue comer con calma
estos platos agrios y picantes sin cambiar su rostro en lo más mínimo.
“……”
Duan
Baiyue no sabía qué hacer con él, pero cuando vio sus ojos llenos de asombro,
sintió… que podía seguir comiendo, sin importar lo picante que fuera.
Si Nan
Moxie supiera esto, definitivamente estaría derramando lágrimas. Habiendo
criado a un alumno así, tan infantil, ¿cómo podría su shifu salvar las
apariencias cuando se encuentre con su difunto padre en la tumba? Ni siquiera
se atrevería a morir.
"¿Delicioso?"
Preguntó Chu Yuan.
"Delicioso",
Duan Baiyue bajó los palillos.
Chu
Yuan: “……”
"Si
lo preparas especialmente para mí, cualquier cosa será deliciosa", sonrió
Duan Baiyue. "Estaba realmente delicioso”.
El
ambiente en la sala era muy bueno. A pesar de que estaba lloviendo afuera, los
truenos retumbaron y los relámpagos brillaron. Incluso si lloviera con
cuchillos, el estado de ánimo seguiría siendo igual de bueno.
Chu
Yuan finalmente recordó y preguntó: "¿Todavía no me has contado qué le
pasó al anciano Mu Chi afuera?"
"Casi
quedamos expuestos.”
“¿Eh?”
Chu Yuan estaba desconcertado.
Duan
Baiyue habló en detalle sobre el incidente con Sai Pan'an.
Chu
Yuan se sintió abrumado por sentimientos complicados: "Solo porque la
perla Fenxing fue robada, ¿pensó que Lan Yizhan había regresado de entre los
muertos?"
Duan
Baiyue dijo: “Supongo que sí.”
Chu
Yuan: “……”
‘Pero el
Fenxing fue tomado por nosotros, y fue solo por curiosidad.’
"Aunque
no está claro si vale la pena reír o llorar en esta situación, todavía hay un
beneficio", dijo Duan Baiyue. "Al menos podemos descubrir el secreto
de la perla Fenxing”.
"¿Cuál
es el beneficio?" Chu Yuan negó con la cabeza. "Se suponía que
Fenxing no pertenecía a nadie en primer lugar, fue un error tomar posesión de
ella. No es de extrañar que todos en Jianghu estén dispuestos a luchar por
ella. Pero ¿realmente lo necesito para entrenar con el fin de llegar a ser
insuperable en las artes marciales en el futuro?”
"Pero
tú eras el único que podía hacer brillar la perla Fenxing", dijo Duan
Baiyue. "Sin embargo, todavía tengo que entender las razones de esto”.
Chu
Yuan todavía no estaba de acuerdo, ni siquiera pensó que sus palabras
descuidadas cuando era niño alguna vez conducirían a tal cadena de eventos.
"Y
una cosa más. Me temo que tendré que molestar al anciano Mu Chi y pedirle que
vuelva a crear un Anillo de Retorno", continuó Duan Baiyue.
"Cuando Sai Pan'an lo consiga, probablemente correrá directamente a la
Montaña del Ataúd de Jade. Quiero seguirlo y echar un vistazo”.
"¡Zhen
te lo prohíbe!" Chu Yuan frunció el ceño. "Después de todo, no eres
parte de Jianghu, ¿por qué querrías correr con eso? ¡Por favor, quédate en Wang
Cheng!”
Glosario:
1. Wangyue
望月,
literalmente "luna llena".
2. El ginseng
y la asta de ciervo joven se utilizan en la medicina tradicional china para
reponer la energía, la circulación, mejorar la función cardíaca y renal, la
debilidad, la dificultad para respirar, el dolor lumbar y de rodilla.
3. Los cinco
venenos son cinco minerales (sulfato de cobre, cinabrio, realgar, piedra de
hierro magnética y lunnita) que se hierven durante tres días hasta que se obtiene
el polvo tóxico.
4. Apuntalar
el cielo con la cabeza 顶天立地 es una metáfora de "grande y
poderoso".
5. Yuan-qi
元气 es el
qi primordial, innato, aún no transformado, aún no zhen-qi (qi verdadero), que
nutre los órganos.
6. carpas
cruzando el río 过江之鲫 es un modismo para un movimiento de moda
que tiene muchos seguidores.
