•❥ ❥• Capítulo 42: Vino Wang Chuan •❥ ❥•
Después de beber, puedes olvidarte
de todo.
"Lord Shang,
consejero Mu", se acercaron Mu Wangxiong y Mu Wanlei. “¿Han
venido a comer?”
"Está
demasiado sofocante en la residencia del yamen, así que decidimos dar un
paseo", dijo Shang Yunze. "Últimamente, debido a los asuntos con la
pandilla Tiger Head, Lord Wen no está de muy buen humor, es mejor mantenerse
alejado de él.”
"Esta
pandilla es difícil de tratar, es mejor lidiar primero con la pandilla del acantilado
Chaomu", dijo Mu Wanlei. "Independientemente de mi puntuación
personal con Zhao Yue, destruir incluso una pandilla beneficiará a la gente. Le
ruego al asesor Lord Mu y a Lord Shang que convenzan a Lord Wen en su tiempo libre.”
Aunque Wen
Liunian había accedido a pensarlo antes, no había forma de que pudiera estar
completamente tranquilo antes de que tomara una decisión final.
"La pandilla
Tiger Head es difícil de tratar, y es poco probable que pandilla del acantilado
Chaomu sea fácil de atrapar", Mu Qingshan negó con la cabeza. "Puedes
preguntarle a cualquiera en la ciudad, todos saben que Zhao Yue es conocido por
su crueldad y por ser un asesino a sangre fría. En ningún caso debemos
apresurarnos.”
"Los rumores
no son muy confiables, asesor Mu. Te estás preocupando demasiado", dijo Mu
Wanlei.
"¿Por qué el
líder Mu está tan seguro de que es solo un rumor?" Mu Qingshan
frunció el ceño. "Anteriormente, usted mismo dijo que Zhao Yue es
definitivamente una mala persona que mata, provoca saqueos e incendios, ¿no es
esa la actitud de una persona cruel?"
Mu Wanlei se quedó perplejo ante esta
pregunta.
"Lord Wen ama
a la gente de este pueblo como si fueran sus hijos, y también se preocupa mucho
por los soldados. Si no está completamente seguro, no se arriesgará", dijo
Mu Qingshan. "Me temo que va a tardar un poco más.”
“¿Tardará un poco
más?” Al escuchar sus palabras, Mu Wangxiong casi vomita sangre.
"Erradicar a
los bandidos es un asunto serio, no podemos tratarlo casualmente, como ir a una
feria del mercado", dijo Mu Qingshan. "El Clan Mu también ha
traído gente. No creo que quieras decirles que ataquen a la pandilla Tiger Head
imprudentemente. Póngase en nuestros zapatos. En cualquier caso, hay que
planificarlo todo bien.”
Su pensamiento
era correcto, pero pensando que se prolongaría durante otros tres a cinco
meses, Mu Wanlei y Mu Wangxiong sintieron una opresión en el
pecho y apenas pudieron contenerse.
"Es hora de
que regresemos". No había nada más de qué hablar, y Shang Yunze dejó los
palillos.
"Lord Shang,
tómate tu tiempo", asintió Mu Wanlei.
Shang Yunze y Mu
Qingshan caminaron lentamente hacia la residencia del yamen. Al ver que los
hombres habían ido lo suficientemente lejos, el apetito de Mu Wanlei y Mu
Wangxiong se deterioró drásticamente. Después de pedir un poco de carne asada,
regresaron al campamento militar. Cuando llegaron al callejón oscuro, Mu
Wangxiong no pudo evitar detenerse y preguntó: "Hermano mayor, ¿qué
piensas?"
"Como acaba
de decir el asesor Mu Qingshan, si no está completamente seguro, Lord Wen no se
arriesgará", dijo Mu Wanlei. "De lo contrario, si son
emboscados, la noticia tendrá un efecto negativo en el desarrollo de su puesto
como funcionario del gobierno.”
"¿De verdad
se va a alargar así?" Mu Wangxiong frunció el ceño.
"Si el
gobierno no toma la iniciativa, entonces depende de nosotros actuar, o
tendremos que presionarlo para que actúe", dijo Mu Wanlei.
"Es fácil
decirlo, pero ¿cómo vamos a hacer que el gobierno se mueva?" Dijo Mu Wangxiong.
"Este prefecto Wen ha visto el mundo, no será coaccionado tan fácilmente.”
"Por
supuesto, el Clan Mu no lo obligará.” Mu Wanlei cambió de tema.
"Anoche hicimos una misión de reconocimiento. ¿Qué opinas de esta
pandilla?”
"Ya sean
tótems o las raíces negras, todo es muy similar a la secta Miao. Es muy
probable que tengamos un ancestro común con ellos", dijo Mu
Wangxiong. "Solo su líder está siendo demasiado pretencioso para decir quién
es.”
"En Miao,
estas raíces negras son como carpas en un río, no hay necesidad de
averiguar quién es", dijo Mu Wanlei. "De hecho, podría ser
solo un puñado de personas que viven en esas montañas. Esto es bueno para ti y
para mí también.”
“¿Por qué crees
eso, hermano?” Mu Wangxiong preguntó desconcertado.
"Mientras el
gobierno no mueva las tropas, los bandidos de las montañas no son una amenaza
para la gente común", dijo Mu Wanlei. "En otras palabras, si
un día la paz en la ciudad se ve repentinamente perturbada, incluso si el
gobierno decide seguir haciendo de la vista gorda, me temo que la gente no
estará de acuerdo.”
Mu Wangxiong más o menos entendió su
intención: "Hermano, ¿quieres decir que vas a hacer un desastre en la
ciudad?"
Mu Wanlei asintió y preguntó: "¿Cuál
es la mejor habilidad de la secta Miao?"
"Por
supuesto, el control con insectos venenosos gu", respondió Mu
Wangxiong.
"Qué suerte
que la pandilla Tiger Head y las tierras Miao estén conectadas. Entonces
seremos guerreros y ellos serán bandidos, y nadie sospechará del Clan Mu",
dijo Mu Wanlei. "Cuando haya disturbios en la ciudad, el gobierno
tendrá que enviar sus tropas.”
"Sin
embargo, su capacidad de destruir la pandilla Tiger Head no es tan importante
para nosotros", dijo Mu Wangxiong. "Todavía no podemos
deshacernos de la gente del acantilado Chaomu, ¿no es una pérdida de tiempo
para nosotros?"
"Si se destruye
la Tiger Head, las defensas del acantilado Chaomu se hará aún más débil.
Además, después de este incidente, el gobierno tendrá que acelerar la
consideración del exterminio de los bandidos", dijo Mu Wanlei.
"Después de todo, si Tiger Head causa un disturbio, es poco probable que el
acantilado Chaomu permanezca en paz. Quien llegue primero controla a los demás,
y el que se quede atrás estará bajo el control de otro. El gobierno no puede
dejar de entender este principio.”
"¿No puedes
lidiar con el acantilado Chaomu de inmediato?" Mu Wangxiong
preguntó. “Zhao Yue aún no se mueve, pero no puede ignorar el estado externo de
las cosas. Cuanto más tiempo tenga para prepararse, más peligro corremos.”
"Dado que
tenemos que depender del gobierno, es inevitable que no todo salga como
queremos”, dijo Mu Wanlei. “Es mejor que veas el lado bueno de las cosas,
no hay necesidad de preocuparse.”
“¿Y si Zhao Yue vuelve
a escapar?” Mu Wangxiong volvió a preguntar.
"Si escapa,
entonces no es el mismo Zhao Yue", dijo Mu Wanlei. "Tú y yo
queremos deshacernos de él, y él también quiere deshacerse de nosotros. En
lugar de preocuparse de que se escape, es mejor preocuparse de que aproveche
ese tiempo para colocar numerosas trampas en su territorio, esperando su
momento para vengar el asesinato de su padre.”
Mu Wangxiong escupió furiosamente en el
suelo.
Mu Wanlei le dio unas palmaditas en el
hombro y salieron juntos de la ciudad.
Detrás de ellos,
los dos guardianes oscuros se miraron. Entonces uno de ellos continuó la
persecución, mientras que el otro regresó al yamen para informar de lo que
había oído.
"¿Qué estás
haciendo?" afuera del estudio, Zhao Yue se apoyó contra la puerta con su
espada en la mano y una expresión de disgusto en su rostro.
Wen Liunian se
estremeció de miedo y lo arrastró apresuradamente a la habitación, susurrando
una reprimenda: “¿Por qué estás aquí? ¿No temes que te vean?”
Los guardianes
oscuros en el tejado escucharon y suspiraron al unísono. ‘Un sentimiento tan
obsesivo que tienen una relación secreta. Es imposible no pensar en ello.’
Zhao Yue tiró de
su cabello con enojo: "¿Qué le dijiste a Lu Zhui?"
“¿Al segundo jefe
Lu?” Wen Liunian se congeló. "Nada, solo dije que no tienes una enfermedad
oculta para que no tenga que pensar más en eso".
"Entonces,
¿por qué tiene una cara como si viera un fantasma a plena luz del día, y con la
mirada perdida?" Zhao Yue preguntó.
Wen Liunian
levantó la mano y juró: “Eso es realmente lo que he dicho.”
Zhao Yue lo miró
fijamente por un momento y luego golpeó su espada con fuerza sobre la mesa,
¡con la intención de beberse todo el té del empollón antes de irse!
"¿Por qué
tienes sangre en la cara?" Wen Liunian frunció el ceño.
“¿En serio?” Zhao
Yue levantó la mano y sintió. “Supongo que accidentalmente me corté con una
rama mientras venía de camino aquí.”
Wen Liunian tomó
una pequeña caja de medicamentos y lo ayudó a limpiarse la sangre de la cara.
Zhao Yue dejó la
taza de té, pensando que esta cosa era muy amarga y astringente: ‘¡¿Qué
tiene de bueno este té?!’
Wen Liunian
encendió una vela, abrió un pequeño frasco de ungüento medicado y se acercó. El
aliento caliente tocó el rostro de Zhao Yue, lo que le hizo querer rascarse.
Zhao Yue frunció
el ceño ligeramente.
Wen Liunian
aplicó una fina capa del ungüento y luego sopló ligeramente.
Zhao Yue estaba
entumecido e instintivamente trató de esquivar.
"No te
muevas", lo reprendió Wen Liunian, sosteniéndolo con fuerza por el hombro.
Zhao Yue frunció
los labios: “No soples.”
‘De lo contrario,
me pica el corazón.’
Wen Liunian solo
dijo “Mn”
Zhao Yue
reflexionó que este empollón es bastante bueno cuando es obediente.
"Su
Excelencia", Mu Qingshan abrió la puerta
Le siguió Shang
Yunze.
Y también Lu
Zhui.
Y Hua Tang.
Y Xiao Wu.
Y los guardianes oscuros.
“……”
Wen Liunian
volvió la cabeza y preguntó: “¿Pasa algo?”
Zhao Yue apartó
su mano con una expresión sombría en su rostro.
Mu Qingshan se
escondió detrás de Shang Yunze.
Por supuesto,
Lord Shang estaba de buen humor.
"¡Ejem!",
tosió Xiao Wu. "Su Excelencia, hay algo”.
"Naturalmente
sé que hay algo, de lo contrario, no habrían venido todos juntos". Wen Liunian
se limpió las manos, "¿Qué es?"
El guardián oscuro
relató lo que escuchó de Mu Wanlei y Mu Wangxiong.
“¡¿Cómo pueden
ser tan despreciables?!” Lord Wen estaba furioso.
Zhao Yue también
frunció el ceño ligeramente.
"Nuestros
hombres ya los han seguido, no debe haber problemas," dijo el guardián oscuro.
"Pero si deja que tengan éxito, la gente tendrá miedo de que puedan salir
lastimados. Por lo tanto, debe tomar una decisión con anticipación.”
"Asignen
personas para espiar a Mu Wanlei y Mu Wangxiong primero",
dijo Wen Liunian. “Si tienen la intención de atacar a la gente común, este
funcionario no será amable con ellos.”
"Su
Excelencia, puede estar seguro de que lo arreglaré todo yo mismo", asintió
Xiao Wu.
"Si esparces
veneno gu, ¿hay alguna manera de hacerlo rápida y fácilmente?" Lord
Wen le preguntó a Hua Tang.
"Necesito una
fuente de agua", dijo Hua Tang. "Hay varios manantiales pequeños en
las montañas Cangmang. Fluyendo hacia abajo y desembocan en el río Bai Mang de
la ciudad. Si la gente del Clan Mu le hiciera algo a la fuente de agua, sería
fácil culpar a la pandilla Tiger Head.”
Wen Liunian
asintió y volvió a desplegar el mapa.
"Su
Excelencia, no se preocupe", dijo Hua Tang nuevamente. "Aunque el
veneno gu es siniestro, no es tan fácil propagarlo a gran escala. No es
como lo que se cuenta, que con solo convocar algunos hechizos es capaz de
causar caos en la ciudad.”
"Sin
embargo, si al oponente se le ha ocurrido una idea tan mala, es mejor
prepararse lo antes posible", pensativo, Wen Liunian se rascó la barbilla.
Esa noche
conversaron durante mucho tiempo antes de separarse. Wen Liunian bostezó, se
puso de pie y se estiró.
"Entonces
volveremos y descansaremos", dijo Mu Qingshan. “Usted también debería irse
a dormir, Mi Lord.”
Wen Liunian
asintió: “Señores, vayan con cuidado.”
Lu Zhui fue el
primero en saltar de la casa, por así decirlo, tan rápido como el viento. Por
miedo a que, si se demoraba, lo interceptarían de nuevo.
"El segundo
jefe Lu ha estado caminando cada vez más rápido últimamente", dijo Wen
Liunian.
Zhao Yue lo miró
fijamente y continuó bebiendo su té.
Mientras los
demás salían, Wen Liunian le preguntó: “¿No te vas?”
"Ya te lo he
dicho, Mu Wanlei y Mu Wangxiong no son personas decentes",
dijo Zhao Yue. “Sería mejor eliminarlos con mi espada”.
"Gran jefe
Zhao, es mejor que bebas menos té", dijo Wen Liunian.
“¿Sientes lástima
por mí?” Zhao Yue tomó otro sorbo.
"Es que no
podrás dormir esta noche", dijo Wen Liunian.
"Tú tampoco
podrás dormir", dijo Zhao Yue.
“¿Por qué lo
dices?” Wen Liunian se sentó a su lado.
"Porque la
mente es pequeña y los pensamientos son muchos", dijo Zhao Yue.
Wen Liunian soltó
una carcajada.
Zhao Yue continuó
sirviéndose té y bebiendo, pensando que el empollón se veía bastante bien
cuando sonreía.
"Si bebes
demasiado té, realmente no podrás dormir", Wen Liunian sacó un pequeño frasco
de porcelana azul y blanco de la estantería. "Bebe esto".
“¿Qué es eso?”
Zhao Yue abrió la tapa y vio algo ámbar, pegajoso y espeso, muy similar a la
miel.
"Cresta
roja de grulla [1]", dijo Wen Liunian con seriedad.
Zhao Yue lo
ignoró, recogió un poco con el dedo y dijo en un tono desagradable: “Es dulce hasta
resultar empalagoso.”
“Hay que diluirlo
en agua”. Wen Liunian tomó unas cucharadas y agregó un poco de agua hirviendo.
De repente, los pétalos de aroma dulce se arremolinaron en la taza. Además,
había bastantes trozos de nueces y almendras. Muy adecuado para beber con
bocadillos crujientes de cebolleta. Ni demasiado salado, ni dulce, con un sabor
balanceado y ligeramente ácido.
"Se agrega
un poco de papaya agria", Wen Liunian le entregó una taza. "Lo hice
yo mismo".
"Es
demasiado para un trago de agua", dijo Zhao Yue. Estaba nevando de nuevo,
y la papaya agria, junto con las nueces confitadas, era muy difícil de recolectar.
"Por
supuesto, quiero vivir cómodamente", Wen Liunian sostuvo una taza en sus
manos y bebió lentamente.
"Un cuenco
grande de vino y grandes trozos de carne también son cómodos", dijo Zhao
Yue.
"También
tengo vino", dijo Wen Liunian.
"¿Qué tipo
de vino puedes tomar?" Zhao Yue negó con la cabeza. "Solo vino de
arroz dulce y vino de Shaoxing.”
"Vamos",
Wen Liunian lo arrastró por la manga hasta su habitación de al lado. El
interior estaba limpio y fresco, con dos macetas de orquídeas del valle
colgando de la ventana y un ligero olor a incienso.
Zhao Yue pensó
que este ratón de biblioteca olía así.
Wen Liunian sacó
una jarra de vino del armario, que era pequeña y de apariencia muy delicada: "Cuando
estaba en Yunlan, el joven maestro Shen me lo dio. Su nombre es Wang Chuan.”
"¿Wang
Chuan?" Zhao Yue abrió la jarra e inmediatamente salió un fuerte aroma a vino.
"Cuenta la
leyenda que el hada del vino elaboró solo diez jarras de vino, y esta es una de
ellas", dijo Wen Liunian. "Desafortunadamente, no sé mucho sobre vinos.”
"Este vino
es muy fuerte", dijo Zhao Yue.
"Si no fuera
fuerte, ¿cómo podrías llamarlo Wang Chuan?" Wen Liunian le sirvió una
taza. "Sólo emborrachándose, como uno bebe agua del río en Chuan, puede
uno deshacerse de todas las alegrías y tristezas.”
Zhao Yue echó la
cabeza hacia atrás y se lo bebió todo de un trago.
"Gran jefe,
tómalo por ti mismo", dijo Wen Liunian. "El buen vino debe ser dado a
alguien que lo entienda.”
"Gracias."
"Piensa en
ello como una compensación por esas pequeñas historias", dijo Wen Liunian
después de pensarlo un momento.
Zhao Yue sonrió y
negó con la cabeza. Agarró la jarra y cruzó el umbral de la puerta.
Wen Liunian se
paró en la puerta, lo siguió hasta que desapareció detrás de la cresta de la
pared, y luego se dio la vuelta y entró en el dormitorio.
Los guardianes oscuros
estaban decepcionados. ‘¿Se ha ido todo el mundo a sus habitaciones? ¡¿Y ni
siquiera se quedaron a pasar la noche juntos?!’
‘Nada cambia.
Debemos pedirle al líder del palacio Qin Shaoyu que tenga una conversación
sincera con el Gran jefe de Zhao.’
Al día siguiente,
a primera hora de la mañana, se extendió por la ciudad la noticia de que el
dios patrón de la ciudad había aparecido la noche anterior. Reluciente de oro,
se elevó sobre las nubes y cabalgó sobre la niebla. Mucha gente lo ha visto con
sus propios ojos.
La gente de la
ciudad se agitó de inmediato y, antes de que tuvieran tiempo de comer, todos
salieron a la calle a chismorrear. Li San’er todavía estaba relatando sus
cuentos en colores brillantes mientras estaba de pie en el escenario alto.
"¡Fue un
espectáculo increíble! El dios de la ciudad, vestido con una armadura dorada,
brilló a través de las alturas nubladas y disparó relámpagos desde una altura
de nueve chi.”
Fingiendo ser el
dios de la ciudad, el guardián oscuro se paró entre la multitud de personas,
comiendo una pera y animando, mientras pensaba que no era él quien podría
disparar rayos, sino el líder del Palacio Perseguidor de las Sombras.
"Todo eso
está muy bien, pero ¿por qué apareció el dios de la ciudad?" Hubo gente
que se alarmó con esta noticia. Nadie había oído hablar del poder milagroso del
templo local antes, ya que el incienso no era muy rico y se veía algo
desgastado.
“No lo sé”, Li
San'er negó con la cabeza y suspiró. “Ojalá eso fuera una buena señal…”
En vista del
hecho de que muchas personas habían visto al dios de la ciudad, naturalmente
fueron al templo a limpiar en la tarde del mismo día. La mesa estaba repleta de
ofrendas, y el humo de la multitud de incienso se elevaba.
“Su Excelencia ha
venido”. Alguien con un ojo agudo comentó.
La gente lo
saludaba. Wen Liunian y Mu Qingshan, acompañados por asistentes, entraron en el
templo. Primero, encendieron respetuosamente tres varillas de incienso, después
de lo cual colocaron las frutas que habían traído consigo sobre la mesa de
sacrificios.
“¿Su Excelencia también
vio al dios?” La gente preguntó con cautela.
"No está muy
claro, pero lo he visto con mis propios ojos", asintió Wen Liunian.
“Entonces, ¿sabe por
qué vino?” La gente volvió a preguntar.
"Todavía no
lo sé", Wen Liunian negó con la cabeza. "Sin embargo, ya he enviado
gente para invitar a un médium capaz, deberían venir mañana.”
"¿Se ha
manifestado el dios de la ciudad?" Un poco más tarde, Mu Wanlei
también escuchó los chismes.
"Dicen que
mucha gente en la ciudad lo ha visto", dijo Mu Wangxiong. “Incluso
las autoridades se alarmaron y ordenaron reparar el templo del dios de la
ciudad.”
“¿Cuál es el
truco?” Mu Wanlei sacó su espada. "No me importa, vamos a
verlo".
"Líder Mu"
Tan pronto como los hombres salieron, un sonriente Shang Yunze se acercó a
ellos.
"¿Pasa algo,
Lord Shang?" Mu Wanlei preguntó.
"Quiero
preguntarle algo, pero es personal", dijo Shang Yunze. “¿Tienes tiempo?”
"Por
supuesto", asintió Mu Wanlei, y los dos regresaron juntos a la
tienda.
"De hecho,
quería preguntar por el gu del amor", dijo Shang Yunze.
"¿El gu
del amor? ¿Para uso del líder de la Fortaleza Shang?”
Shang Yunze solo
sonrió y no dijo nada.
Recordando los
diversos momentos entre él y Mu Qingshan en los últimos días, Mu Wanlei
entendió todo y no preguntó nada, solo dijo: “El gu del amor, son solo
rumores en el Jianghu. Nadie en todo el mundo habla del veneno gu.
Incluso si fuera un elixir divino, me temo que es imposible seducir a una
persona de la noche a la mañana.”
“Así que es así”.
Shang Yunze tenía una expresión de pesar.
"Aunque el gu
del amor es falso, todavía hay algo", Mu Wanlei sacó una
botella de polvo. "Esto se llama 'Polvo de invocación de deseos',
está hecha de la flor del amor y causa un intenso calor sexual. No tiene
sabor, por lo que es extremadamente difícil de detectar. Todo lo que necesitas
hacer es disolver una pizca, del tamaño de una uña, en una bebida o comida. En
menos de una hora, despertará en una persona sentimientos, un fuerte deseo y
calor corporal. En sus pensamientos solo habrá sed de estar junto al ser amado.
"¿Es un
afrodisíaco?" Preguntó Shang Yunze.
"No,
no", Mu Wanlei negó con la cabeza. "Esta cosa es tan
maravillosa que después de usarla, todos los huesos del cuerpo se vuelven
blandos como la mantequilla. Penetra profundamente en los huesos y le hace
querer la próxima vez. Naturalmente, se apegará al líder de la Fortaleza Teng
Yun”.
"¿Es tan
efectivo?" Shang Yunze se tocó la nariz, claramente sintiendo un gran
interés.
"Por
supuesto", dijo Mu Wanlei. “Pruébalo, líder de la Fortaleza.
Independientemente de si es un hombre o una mujer, te garantizo que nadie puede
resistirse.”
Shang Yunze
guardó la botella y conversó un rato con los hermanos, preguntando sobre las
escuelas en las tierras de Miao hasta que la luna salió por el este. Luego se
despidió y se fue.
Mu Wanlei y Mu Wangxiong
bostezaron y se fueron a la cama. Naturalmente, no tenían fuerzas para ir a
ninguna parte. Ambos admitieron que este hombre tenía una gran habilidad para
charlar ociosamente.
En su camino de
regreso, Shang Yunze tiró una botella de polvo en un cementerio abandonado: ‘Es
una mierda, si me quedo con eso por más tiempo, será un insulto a mi amado.’
En la mansión Shang,
Mu Qingshan estaba sentado frente a la estufa de la cocina, sosteniendo un
pequeño abanico Pu para avivar las llamas. Había una pequeña olla en el
fuego, en la que algo gorgoteaba y olía muy sabroso.
Shang Yunze entró
en la cocina, se inclinó detrás de él y le cubrió los ojos, riendo suavemente
al oído: “Te robo”.
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1. 1. Cresta
roja de grulla:
aquí WL está bromeando con ZY. Su nombre en chino es Heding Hong 鹤顶红, veneno altamente potente conocido como trióxido de
arsénico.
