DWGL - 106: Mercado nocturno de Wang Cheng

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"¿El gobernante del Reino de Baixiang es feroz y cruel?". Chu Yuan preguntó: "¿Dónde se enteró de esto, puede ser que lo hayas visto con tus propios ojos?".

 

Mu Chi dijo: “No lo he visto, pero sus subordinados eran todos como comieran explosivos, siempre maldiciendo con intención asesina. Gracias a mi rápida huida y al rescate del dueño de la Montaña del Té, temo que me hubieran secuestrado hace mucho tiempo.”

 

Chu Yuan añadió: "¿Puedo preguntar de nuevo, qué tipo de asuntos estas personas quieren discutir con usted?".

 

“No entré en detalles en ese momento, pero luego, cuando insistí en preguntar, dijeron que solo querían armarios y sillas de madera, pero nadie es tonto. Si solo quieres mesas, sillas y armarios, cualquiera en la ciudad de Dayan lo pueden hacer. Algunos de los artesanos son incluso mejores que yo. Aun así, insistieron en arrastrarme a Nanyang a pesar de que existían manos expertas a un bajo precio, ¿quién puede creerlo?”

 

Chu Yuan asintió con la cabeza y dijo: "Sucede que, dentro de unos días, el Reino de Baixiang vendrá a discutir asuntos conmigo, y todavía tengo que agradecerle por este recordatorio."

 

"¿De verdad, quiere venir en persona?” El anciano Mu Chi se sobresaltó y agitó las manos: “Por favor, que no sepa que estoy en aquí".

 

"Usted se preocupa demasiado, incluso si lo sabe, ¿y qué?" Chu Yuan sonrió: “Una mera nación insular, ¿cómo se atrevería a arrebatarme a alguien?".

 

“Sí, sí, lo que dice Su Majestad es absolutamente cierto”, el anciano Mu Chi se dio unas palmaditas en la cabeza, “Qué tonto soy, estoy acostumbrado a esconderme en el Jianghu y no he podido superarlo”.

 

“Ya que estás aquí, sentémonos y tomemos una taza de té juntos.” Chu Yuan dijo: "En cuanto al dueño de esta montaña de té, no está en palacio últimamente, volveré a preguntar a los viejos funcionarios dentro de un rato".

 

Después de la Batalla del Mar del Este, Wen Liunian solicitó medio año de licencia y se fue de turismo con Zhao Yue a las montañas de Shuzhong en Jiangnan. Pasaría medio año antes de que regrese a Wang Cheng.

 

Todos los funcionarios de la corte decían que el Emperador mimaba mucho a Lord Wen Liunian, respondiendo a todas sus solicitudes y no había nadie más en el mundo con el que fuese cariñoso. Solo el eunuco Sixi que estaba escuchando, reía mientas tomaba sus manos, el Emperador, naturalmente, adora a su querido funcionario Wen Liunian, pero si se pudiera decir que es extremadamente cariñoso, tendría que ser el Rey del Suroeste.

 

Duan Yao dio vueltas alrededor de diez carruajes llenos de tesoros exóticos, llorando de alegría y secándose la saliva.

 

‘Mi cuñada es el Emperador, así que esto es lo que se siente.’

 

‘¡Poderoso! ¡Y rico!’

 

Duan Baiyue dijo: "¡Qué vergüenza!"

 

Duan Yao preguntó: "¿Se considera esto un como regalo de compromiso?"

 

Duan Baiyue corrigió: "Es la dote".

 

"Como quieras". Duan Yao metió un puñado de oro en un pequeño bolsillo de tela. "¿Vas a dar un regalo a cambio?".

 

Por supuesto, Duan Baiyue fue personalmente a la bodega, seleccionó las diez mejores botellas de Feixia y las envió lo más pronto posible a Wang Cheng.

 

Duan Yao hizo un puchero: "¿Por qué siempre envías esto?"

 

‘No es un regalo lujoso en absoluto.’

 

Duan Baiyue le dio una palmadita y abrió despreocupadamente una carta que acababa de llegar: tenía una salvaje y desinhibida letra cursiva muy propia de su shifu. Duan Yao también se acercó y lucho por reconocerla durante mucho tiempo, antes de decir decepcionado: "El shifu no va a volver aún, ¿verdad?".

 

"Muy bien" Duan Baiyue dobló la carta con calma, “Tendremos tranquilidad”.

 

En alguna montaña solitaria cerca del mar, Nan Moxie estaba completamente empapado y su cabeza todavía goteaba agua. Desgarraba muslos de pollo alrededor del fuego y bebiendo vino. De repente sintió que le picaba la nariz y estornudó violentamente hasta sentirse mareado mientras su nariz se puso roja. Sopló su bigote insatisfecho.

 

‘¡Traidores!’

 

En Wang Cheng, Chu Yuan rara vez tenía tiempo libre después de ocuparse de los asuntos gubernamentales ese día, por lo que se fue a dar un paseo por los jardines imperiales con Sixi para relajarse. Sin darse cuenta, caminó hacia un gran patio donde la puerta estaba abierta. Los ancianos que estaban allí preparaban el almuerzo mientras hablaban y reían. Se veían muy alegres.

 

 

"Todos son ancianos de viejo palacio", explicó Sixi en un susurro, "Están aquí para disfrutar de la vida.”

 

Chu Yuan asintió ligeramente, ''No los molestes.”

 

Sixi estuvo de acuerdo, pero estaba un poco desconcertado en su corazón: ‘¿Qué es lo que mira el Emperador así, tan ensimismado?

 

Un anciano lavaba el arroz, lo vertió en una olla con agua y luego agregó la leña en el fogón, después, tomó un pequeño abanico pu y se sentó en un taburete para abanicarlo lentamente.

 

Chu Yuan se dio la vuelta y se fue, pensando lentamente mientras caminaba, ‘No parece difícil lavar el arroz’.

 

"Su Majestad" Shen Qianfan salió de los arbustos del lado opuesto.

 

Chu Yuan sonrió: "¿Qué está haciendo general Shen?”

 

"Fui al bosque a recolectar algunas flores". Shen Qianfan dijo: "Tengo un amigo que quiere flores rojas, y hace un rato le pregunté al Doctor Imperial Xue, y me dijo que viniera al bosque a cavar."

 

Chu Yuan se acarició la barbilla, "Amigo".

 

Shen Qianfan dijo con cara seria: "Este general todavía tiene otras cosas más que hacer…"

 

"¿Por qué estás entrando en pánico? no tengo intención de preguntar quién es ese 'amigo'". Chu Yuan le dio una palmadita en el hombro y añadió: "Además, lo sé sin que digas nada".

 

"¡Ejem!" Shen Qianfan rápidamente cambió el tema: “Li Ying escribió una carta.”

 

"¿Hmm?" Chu Yuan dijo: "¿Sobre el paradero de Li Que?”

 

"Exactamente." Shen Qianfan dijo: "Se dice que salió a la mar y fue a Nanyang desde la ciudad de Guanhai.”

 

Chu Yuan frunció el ceño: "¿Nanyang?”

 

“Sí”. Shen Qianfan dijo: “Aunque los subordinados del Pabellón Tianying perdieron el rastro a mitad de camino, la dirección general no debería estar equivocada.”

 

Chu Yuan dijo: “Parece que Li Que ha descubierto algo, así que se atreve a ir a Nanyang. En realidad, es muy valiente.”

 

"Esto le causado muchos dolores de cabeza a Li Ying”. Shen Qianfan dijo: “Él siempre ha tenido un estilo discreto y, por alguna razón, ha tenido una hermana tan desviada.”

 

"Ahora que hay una pista, ¿el Pabellón de Tianying va a enviar a alguien para perseguirla?" Preguntó Chu Yuan.

"Este es el propósito de la carta de Li Ying." Shen Qianfan dijo: "Es un asunto de gran importancia, es mejor preguntarle primero a Su Majestad".

 

Chu Yuan le susurró unas palabras al oído.

 

Shen Qianfan tomó la orden y salió del jardín imperial.

 

Al mismo tiempo, la Mansión del Suroeste también recibió una carta, que fue escrita por el líder de la Torre Feiluan, y también se escribió que Li Que debería haber viajado a Nanyang por mar.

 

"¿Por qué molestarse?” dijo Duan Yao mientras quemaba la carta, "El que la engañó también la perseguirá.”

 

Duan Baiyue dijo: "Por la palabra de amor, hay muchas personas en este mundo prefiere agarrar el toro por los cuernos.”

 

Duan Yao dijo: "No entiendo, y no quiero entender.”

 

"Tarde o temprano tendrás que conseguir una esposa y casarte”. Duan Baiyue golpeó su cabeza, “¿Acaso quieres estar soltero por el resto de tu vida?”

 

"¿Qué tiene de bueno casarse?" Duan Yao dijo: "Es ruidoso todo el día, y hay una persona más para controlarme".

 

Duan Baiyue se quedó boquiabierto.

 

"Si continuas hablando de esto, mejor me voy a practicar." Duan Yao se dio la vuelta para salir.

 

Duan Baiyue dio un manotazo en la mesa y golpeó con la palma de la mano la parte superior de su cabeza.

 

Duan Yao se apartó apresuradamente del camino y dijo enojado: "¡Ya no eres mi hermano!"

 

‘¡Golpearé la cabeza también!’

 

La tía Jin llevaba dos tazones de fideos, y antes de entrar al patio, vio a los dos hermanos saltando desde lo alto de la pared, así que tuvo un dolor de cabeza. Hace poco se estaba peleando sobre comer carne de res con vegetales o fideos salteados. Finalmente hicieron los fideos y se los trajo. Ahora ¿Por qué volvieron a pelearse?

 

El campo de entrenamiento de artes marciales detrás de la montaña estaba muy vacío. Tanto la espada Lieyun como Xuan Ming Hantie se insertaron en el suelo. Después de más de cien movimientos con sus propias manos, Duan Yao frotó su puño de lado, como un pájaro entre las copas de los árboles, su postura era enérgica y diestra, como si pudiera recoger estrellas y sostener la luna.

 

Duan Baiyue lo derribó al suelo.

 

Duan Yao no daba abasto: "¿Se acabó la práctica?".

 

"¿Estos son todos los movimientos del Fenxing Ju [1]?" Preguntó Duan Baiyue.

 

“Mn”. Duan Yao dijo: "No entra en conflicto con el arte marcial enseñado por shifu, e incluso se complementan entre sí, así que lo seguí practicando.”

 

Duan Baiyue dijo: "Cuando el anciano Xuantian te enseñó este conjunto de movimientos, ¿te dijo de dónde venía?".

 

“No dijo el origen, solo dijo que aprender este conjunto de movimientos podría salvarte la vida. Pensé que estaba relacionado con el Jin Can Xian o el Tian Chen Sha, así que acepté practicar, pero no pareció ser útil más adelante.”

 

Duan Baiyue sonrió y extendió la mano para arreglarle el cabello: "Trabajaste duro por mí.”

 

"Solo aprendí un conjunto más de movimientos en artes marciales." Duan Yao agitó la mano con un gesto muy rápido y caballeroso.

 

‘Mientras estés fuerte, sano y te cases pronto, ¡todo irá bien!’

 

El tiempo transcurrió rápido, y medio año pasó en un abrir y cerrar de ojos. Junto con Zhao Yue, Wen Liunian tirando de varios carruajes cargados de tocino especial, sintiéndose feliz de regresar a Wang Cheng.

 

Diez días después, el Emperador Chu emitió un decreto para anunciar al mundo el ascenso de Wen Liunian como su primer ministro y que sería el jefe de cien funcionarios para ayudar al Hijo del Cielo a gobernar.

 

Los espías de la Mansión del Suroeste en el palacio imperial, se sacudieron la muñeca dolorida y el corazón cansado de tanto redactar cartas.

 

‘Su Majestad cenará con Lord Wen esta noche.’

 

‘Su Majestad todavía está cenando con Lord Wen esta noche.’

 

‘Su Majestad esta noche…’

 

‘Su Majestad…’

 

“……”

 

Duan Baiyue montó su caballo, levantó su látigo, su caballo Huo Yunshi relinchó hacia el cielo, y sus cuatro pezuñas aplastaron el viento de la montaña.

 

 

"Lord Tao." Después de que terminó el día, Liu Dajiong dijo: "Vamos a comer carne estofada”

 

Tao Rende enarcó las cejas: “Normalmente comes carne asada, ¿por qué se ha convertido hoy en estofado de carne?”

 

"Hay cosas buenas, pero no podemos hacer una celebración aún". Liu Dajiong dijo, "El gobernante del Reino Baixiang ha viajado miles de millas para ver al Hijo del Cielo de mi Gran Chu, y esta es la primera vez que esto sucede. Con un país tan próspero, nosotros deberíamos celebrar con carne estofada".

 

Tao Rende dijo: "Pero tú pagarás.”

 

"Pagaré lo que tenga que pagar." Liu Dajiong salió con él y saludó por el camino, “¿Lord Wen quiere comer carne estofada con nosotros? ¿Dónde está el Lord Li? ¡Vamos! ¡vengan! Lord Zhou también se unirá.”

 

Tao Rende torció las comisuras de su boca: ‘Este viejo Liu es realmente tacaño casi todo el tiempo, pero también es realmente generoso cuando le da la gana’.

 

Un grupo de funcionarios salió felizmente del palacio a comer carne estofada. Después de escucharlos, Chu Yuan sonrió y bromeó: "Esto no es amable de parte del querido funcionario Liu se fue al este, pero no me avisó.”

 

"Su Majestad también debería salir a pasear esta noche." Sixi dijo: “Recientemente, hay muchos puestos en los mercados nocturnos del este, oeste, norte y sur. Están abarrotados. Escuché que son muy animados.”

 

Chu Yuan asintió feliz: "Está bien.”

 

Después de una tarde de plegarse en la sala de estudio imperial, no tenía mucho apetito para comer. Al ver que el cielo ya estaba oscuro, Chu Yuan se puso ropa informal y salió del palacio con Sixi.

 

El lugar estaba muy animado. Solo con los niños ruidosos que corrían de un lado a otro, era suficiente para provocarte un dolor de cabeza. No cabía ni siquiera una aguja en este mercado nocturno. Casi todos los puestos están llenos de gente, comiendo, bebiendo y divirtiéndose. No escaseaba nada.

 

"Es hora de ampliar este lugar”. Chu Yuan se dio la vuelta, "Vamos, salgamos a dar un paseo por la calle Zhengyang.”

 

"¿Su Majestad no quiere comer algo?" Sixi preguntó en voz baja: "Si hay demasiado ruido, ¿quiere ir a la residencia Shanhai a sentarte?”

 

"No tengo mucho apetito, caminaré un rato." Chu Yuan sonrió, "Dile a los guardias, que no me sigan, quiero estar solo por un rato.”

 

Sixi dudó: "Hay tanta gente aquí que Su Majestad no debería tomarlo a la ligera.”

"Soy consciente de eso”. Chu Yuan dio unos pasos al frente sobre la loza: “No sigas a Zhen, siéntate y cómete un tazón de albóndigas calientes y descansa un rato.”

 

"¿Eh?" El anciano Sixi estaba en una posición difícil, ‘Esto…’

 

Chu Yuan ya había caminado lejos solo.

 

A través de la bulliciosa calle Zhengyang, cruzando el puente Happy Horse y rodeando la Pagoda Wangyue, había un callejón poco iluminado al fondo.

 

Un hombre sostenía una espada, apoyado contra la pared y mirándole con una ceja levantada.

 

Chu Yuan estaba tranquilo y relajado: "Sigo pensando que siempre me seguirás por todo Wang Cheng.”

 

Duan Baiyue le tendió la mano: "Ven aquí.”

 

Chu Yuan se detuvo: "No.”

 

Duan Baiyue soltó una carcajada y avanzó unos pasos para estrecharlo entre sus brazos, susurrándole al oído: "Primero fui al palacio, no había nadie y no sabía adónde habías ido, así que sólo miré a mi alrededor."

 

"¿Entonces qué?" Preguntó Chu Yuan.

 

"Wang Cheng no es pequeño. Cuando vine de la Torre Linglong, había hombres y mujeres buscando matrimonio en todas partes. No se podía caminar y casi me sacan del puente. Alguien vio que había estado mirando a mi alrededor, así que me preguntó si había perdido a mi esposa y como tenía una voz fuerte me podía ayudar a encontrarla, gritando por un centavo a la vez.”

 

Chu Yuan reprimió una carcajada.

 

"¿Para qué llamar a mi esposa con gritos?" Duan Baiyue lo abrazó con fuerza, "No es lo mismo, si puedo encontrarlo yo mismo y ahorrarme el dinero.”

 

Chu Yuan extendió las manos para cubrirle las mejillas: "¿Tienes frío? ¿Por qué estás vestido con ropa tan delgada?”

 

“No tengo frío”. Duan Baiyue dijo: “Tengo hambre.”

 

Chu Yuan curvó los labios: "Interesado.”

 

“Tenía mucha hambre y estaba cabalgando todo el camino, así que solo comí un bollo con agua al mediodía. Estaba duro y frío.”

 

“Ven”. Chu Yuan tomó su mano, "Vamos a comer wontons.”

 

"¿Recuerdas que hay un puesto de wontons aquí?" Duan Baiyue estaba un poco sorprendido.

 

"No solo lo recuerdo, también vine a comer solo, mientras te escondías en la Mansión del Suroeste, fingiendo estar muerto.”

 

Duan Baiyue: "……”

 

“¡Ejem!”

 

En comparación con antes, el negocio del puesto de wontons es mucho más próspero y no había lugar para sentarse. Duan Baiyue compró dos tazones grandes, agregó chile y vinagre de arroz, y caminó con Chu Yuan a un lugar apartado, sentado en los escalones de la casa de otra persona para comer wonton de carne fresca.

 

Había perros ladrando salvajemente en el patio, y Chu Yuan preguntó: "¿Qué pasa si salgo corriendo?"

 

Duan Baiyue sopló una porción para él, "Entonces come más rápido".

 

Chu Yuan estuvo de acuerdo y tomó un sorbo de la sopa.

 

A la entrada de la calle, Wen Liunian sonriendo y haciendo señas a un grupo de colegas para que se acercaran: “¡No coman wontons! ¡vengan a comer a la residencia Shanhai! Hay nuevos cocineros y platos. Se están preparando brotes de bambú recién llegados de Jiangnan con tocino de Shuzhong. Es delicioso y no necesitan pagar. Es un regalo para los invitados.”

 

Todos los funcionarios estaban de buen humor. Al mediodía, Lord Liu Dajiong invitó carne estofada, y por la noche, Lord Wen Liunian los invitó a cenar en la residencia Shanhai.

 

Realmente es un buen día para que todo salga bien.

 

Glosario:

1.    Fenxing Ju: estos movimientos los aprende Yao’er con el anciano Xuantian en el tablero de ajedrez, si necesitas recordar puedes regresar a los capítulos 52 y 53.