Capítulo 100: Vayamos juntos.
Esta noche, Qin Shaoyu y Shen Qianfeng se quedaron despiertos hasta muy
tarde hablando. Shen Qianling se acostó en el catre de madera detrás de la
pantalla, se acurrucó debajo de la manta y durmió profundamente.
Aunque durmió hasta tarde, a la mañana siguiente, Shen Qianling todavía
estaba acostumbrado a despertarse temprano, frotándose los ojos mientras
intentaba sentarse, cuando un beso caliente y húmedo se plantó en sus labios.
—Es temprano —Qin Shaoyu lo abrazó con fuerza— duerme un poco más.
—No tengo sueño —Shen Qianling estiró su espalda— ¿Dónde están mi hermano
mayor y Lord Ye?
—Ye Jin todavía está durmiendo, Qianfeng se levantó temprano, debería
estar preparando su medicina ahora —Qin Shaoyu agarró las yemas de sus dedos y
los besó—. Anoche, estabas inquieto, pateando y murmurando, ¿con qué soñaste?
—Soñé que había muchos pájaros de luto otra vez, y luego no podía
encontrarte —Shen Qianling enterró la cabeza en su pecho.
«De hecho, también tuve un sueño sobre Ironman y Hulk, ¡pero no puedo
decirte eso!»
—Ya no volverá a pasar —Qin Shaoyu le dio una palmadita en la espalda— no
pienses demasiado en eso.
—Mn —Shen Qianling se estiró perezosamente y se sintió muy cómodo.
—Hoy quédate aquí con Qianfeng —dijo Qin Shaoyu— voy a buscar a Xiao
Zhan y Yin Wushuang.
—… Oh… —Shen Xiaoshou se mostró un poco celoso.
El líder del palacio Qin sonrió y le mordió la punta de la nariz.
«¿Por qué eres tan celoso?»
—Ten cuidado en el camino —advirtió Shen Qianling— sal temprano y
regresa temprano.
Qin Shaoyu sintió con la cabeza y suavemente apoyó su frente contra la
de él.
—Está bien.
Las orejas de Shen Qianling estaban un poco calientes, «joven guerrero,
¿no deberías sonreír con tanta dulzura…? ¡Realmente eres un zorro astuto!»
Después de desayunar algo sencillo, Qin Shaoyu se puso en marcha para
reunirse con Xiao Zhan y los demás. Shen Qianling primero acompañó a Ye Jin a
charlar un rato, pero luego vio que él estaba un poco cansado, así que lo ayudó
a acostarse y luego salió al patio a buscar a su hermano mayor.
—¿No van a charlar más? —Shen Qianfeng estaba organizando las hierbas
secas, clasificándolas y almacenándolas según las instrucciones previas de Ye
Jin.
—El médico divino Ye no se siente bien, así que lo dejé descansar un
poco más —respondió Shen Qianling.
El primer joven maestro Shen frunció el ceño.
—¿Qué tiene?
—… ¡Le duele la cabeza! —dijo Shen Xiaoshou con seriedad— También le
duele el cuerpo, el corazón, el hígado, el bazo y los pulmones, ¡es como si le
estuvieran mordiendo miles de hormigas, simplemente peor que la muerte!
Shen Qianfeng se quedó paralizado por un momento y luego se volvió hacia
él, sin palabras.
—¿Por qué no corriste llorando adentro? —el cuarto joven maestro Shen se
quejó.
«¡Nada conmovedor!»
—¿Crees que todos son como tú? —dijo Shen Qianfeng— la próxima vez que
te dé un impulso y sigas a otros a saltar un acantilado, verás cómo te arreglo.
—¡Bah bah bah! —Shen Qianling protestó— ¡Este tipo de cosas nunca
deberían volver a suceder!
«¡Mi hermano mayor es realmente un bocazas!»
—¿Qué tiene de bueno Qin Shaoyu? —Shen Qianfeng golpeó su cabeza— ¿Vale
la pena perder tu vida por él?
—¿Quieres escuchar la verdad? —Shen Qianling estaba extremadamente
serio.
—Por supuesto —Shen Qianfeng asintió.
—En realidad, no tenía tiempo para pensar tanto en ese momento —Shen
Qianling se sentó en una silla colgante mientras comía frijoles de soja —¡Para
cuando reaccioné, ya estaba abrazado en el acantilado!
Shen Qianfeng: “…”
«¿Acaso eres de la familia Shen? ¿Cómo puedes ser tan tontos?»
—Ya no quiero hablar de mí, hablemos de ti —Shen Qianling dejó caer la
cáscara de soja a un lado.
—¿Qué puedo decir? —Shen Qianfeng se dirigió resueltamente hacia la
casa.
—¿Te gusta Lord Ye? —preguntó Shen Qianling, con una voz tan alta que
era como si estuviera gritando.
Shen Qianfeng se quedó ciego de rabia y le lanzó una mirada fulminante.
Ling’er completamente sin miedo, con una mirada que decía «De todos
modos, Lord Ye ya debe haberse despertado por mi ruido. Tú decides, ¿prefieres
mantener las apariencias o a mi cuñada? La decisión es tuya».
Shen Qianfeng no sabía si hablar o no, por primera vez en su vida tuvo
el deseo de desaparecer instantáneamente.
«¡En momentos como este no se puede estar en silencio! Ambos son tan
orgullosos, ¿cómo se pueden soportar?» Shen Qianling casi quería agarrar del cuello a su
hermano mayor y sacudirlo. «¿No deberían aprovechar el momento para confesar
sus sentimientos?»
—… voy a echar un vistazo afuera —Shen Qianfeng salió rápidamente.
—¡Eh! —Shen Qianling estaba completamente sin palabras, «¿Qué pasaría
si fueras un poco más hombre? ¡Evitar la realidad es realmente muy poco
masculino!»
Ye Jin se recostó de lado en la cama, escuchando la puerta lejana
abrirse y cerrarse, y finalmente su mano, que había estado aferrada a la sábana,
se relajó.
Tenía un sudor frío en la espalda y no podía describir qué emoción había
en su corazón, pero sus ojos estaban un poco calientes.
—¿Estás despierto? —Shen Qianling abrió la puerta con cautela.
Ye Jin limpió sus emociones, se sentó y le sonrió…
—… Lo siento por lo de antes —Shen Qianling se sintió un poco culpable,
originalmente quería presionar a su hermano un poco, pero desafortunadamente no
lo logró.
Ye Jin negó con la cabeza, como si no hubiese escuchado nada en este
momento.
«Entonces, ¿qué es lo que realmente sucedió entre estos dos…?» Shen
Xiaoshou estaba ansioso por saberlo, pero no se atrevía a preguntar. Solo podía
mirar fijamente a su supuesta cuñada, dejando que su mente divagara
frenéticamente toda la tarde, hasta que Qin Shaoyu regresó por la noche y todo
se calmó.
—¿Cómo te fue? —preguntó Shen Qianfeng.
—Xiao Zhan definitivamente tiene lo que se necesita para ser una niñera —Qin
Shaoyu se sirvió un vaso de té frío.
Shen Qianling: “…”
—Yin Luoxue aún no ha recuperado sus habilidades marciales, pero ya no
corre peligro de muerte —dijo Qin Shaoyu.
—Entonces Yin Wu… ¿dónde está el líder de la secta Wu Xue? —Shen
Qianfeng corrigió la mitad de lo que dijo a tiempo.
Shen Qianling lo miró con un poco de incredulidad.
—No solo no le pasó nada, sino que además fue engordado por Xiao Zhan —dijo
Qin Shaoyu, sorprendiendo a todos.
—¡Cof, cof! —Shen Qianling se atragantó con el agua.
«Esta frase es realmente aterradora».
—Ya han planeado infiltrarse en la aldea Qianwu dentro de siete días
para investigar —dijo Qin Shaoyu— Yo también iré con ellos.
—Para la primera exploración no es necesario que haya muchos —dijo Shen
Qianfeng— Tú y Yin Wushuang son expertos en qinggong…
—¡Ejem! —Qin Shaoyu tosió.
—Entonces dejemos que Xiao Zhan vaya —Shen Qianfeng accedió con agrado.
Shen Qianling: “…”
«Joven héroe, ¿qué hay de tu integridad?»
—Prolongar esto no tiene sentido, debemos partir pronto hacia la ciudad Linshui
—dijo Qin Shaoyu— si seguimos perdiendo tiempo, realmente temo que Feng Jiuyue
mate a los líderes de las sectas.
Shen Qianling suspiró en su corazón.
«Si pudiera pasar toda mi vida en el pequeño pueblo, sería algo muy
bueno».
Pero la realidad y los sueños siempre tienen una diferencia, así que
unos días después, el grupo regresó a la ciudad Linshui.
—¡CHIRP! —Maoqiu estaba durmiendo la siesta en el techo, pero cuando lo
vio, inmediatamente se separó de los brazos del guardia oscuro, enderezó sus
cortas alas y corrió hacia abajo como una albóndiga.
Shen Qianling se sorprendió y rápidamente se acercó para atraparlo.
La bola de plumas se frotó contra la palma de su mano con satisfacción,
y sus ojitos negros eran redondos.
—¡Bájame ya! —Ye Jin, sorprendido, extendió la mano y comenzó a golpear
a Shen Qianfeng con todas sus fuerzas.
El primer joven maestro Shen no se veía muy bien, así que lo bajó de sus
brazos.
Ye Jin con las piernas débiles, se movió rápidamente hacia adelante.
—¿Este es el pequeño Fénix?
Maoqiu miró atentamente a Shen Qianling, «¡quién es este!»
Shen Qianling agarró la mano de Ye Jin y frotó la cabeza del pequeño Fénix
dos veces.
—Tómatelo con calma, le gusta mucho y te considerará como a un amigo.
Ye Jin pintó un tigre como un gato, y frotó tentativamente el plumaje.
—¡Chirp! —El pequeño Fénix estaba tan cómodo que cerró los ojos de
inmediato y tomó la iniciativa de acurrucarse, ¡era tan lindo!
Ye Jin también comenzó a querer desesperadamente uno.
Shen Qianfeng miró a Qin Shaoyu.
—Se acabó —el líder del palacio Qin extendió las manos y dijo— Solo
queda este, quien intente llevárselo, Ling’er definitivamente luchará con él
hasta el final.
Shen Qianfeng: “…”
—Las habitaciones ya están listas —dijo Hua Tang al acercarse con Lord
Zhou—. Ya casi amanece, así que todos descansen bien primero.
—¡Chirp! —al escuchar la voz de Hua Tang, Maoqiu se lanzó alegremente
hacia ella.
La guardiana de la izquierda actuó rápidamente y lo atrapó con dos
dedos.
—Chirp… —el ataque sorpresa falló, y el pequeño Maoqiu mostró una ligera
decepción en su mirada.
«¡Pensé que podría frotar algo suave otra vez!»
Los guardianes secretos se sentaron en el techo y suspiraron
colectivamente. «Si Xiao Wu tuviera la mitad de la picardía del joven maestro
del palacio, no estaría en esta situación sin haberla conquistado ya».
«Exacto, como este pequeño Fénix es el hijo biológico del joven maestro
Shen, debe ser el joven maestro del palacio, sin duda».
Unos días después, Xiao Zhan y los demás también llegaron a la ciudad Linshui,
y el pequeño patio se llenó de repente.
Incluso en medio de las dificultades, Yin Wushuang seguía vistiendo una
túnica blanca, pareciendo una flor de loto de nieve en las montañas Tianshan.
Shen Xiaoshou miró hacia abajo su tosco vestido de lino y de inmediato sintió
que era inferior.
«¡Qué molesto!»
—Ver que estás bien es un alivio —Xiao Zhan miró a Shen Qianling— Antes
escuché que Feng Jiuye te había arrojado por un acantilado, casi fui a buscarlo
para pelear.
—Eh, tengo mucha suerte —Shen Qianling se sintió un poco avergonzado,
después de todo, estaba frente a tantas personas.
—¿Cuándo iremos a la fortaleza aldea Qianwu? —preguntó Yin Wushuang.
—Mañana por la noche. el segundo maestro Xiao y yo nos encargaremos. Tú
quédate aquí con Qianfeng para proteger a todos, en caso de que la secta
demoníaca nos descubra y ataque —dijo Qin Shaoyu.
—Mis habilidades en artes marciales son muy inferiores a las del líder
Yin —dijo Xiao Zhan con calma—. Naturalmente, debería ser él quien fuera con el
líder Qin a la fortaleza de la aldea Qianwu.
Yin Wushuang soltó un resoplido frío, pero no dijo nada al respecto.
«¡Qué te importa! Si yo supiera artes marciales, ni de broma te tocaría,
¿entiendes?» Shen Qianling levantó en su mente un pequeño dedo
medio en versión chibi.
—Lo importante es el panorama general, Shaoyu, ve con el líder Yin —aunque
suele bromear con su hermano menor, Shen Qianfeng es muy decisivo en asuntos
importantes—. Ahora todos descansen primero para recuperar energías para
mañana.
«Como era de esperar…» Shen Qianling suspiró en su corazón.
«¡El hermano mayor es realmente muy molesto!»
Hasta que los dos regresaron a la habitación, se lavaron y se metieron
en la cama, Shen Qianling seguía advirtiendo seriamente:
—¡Hay que separar el trabajo de lo personal!
—Por supuesto —Qin Shaoyu asintió.
—¿Y si él te seduce? —¡Shen Xiaoshou entrecerró los ojos, «este tipo
de vacuna debe administrarse con anticipación!»
—Con una mano lo golpeo —el líder del palacio Qin levantó la mano— Prometo
que en esta vida solo tendré a Ling’er.
—… Las acciones deben ser cuidadosas —las palabras de amor fueron
demasiado repentinas, así que Shen Qianling cambió de tema con calma.
—Por supuesto, mi esposa todavía estará en casa esperándome —Qin Shaoyu
sonrió y dijo—. No te preocupes, no es como si fuera a pelear, tengo mucha
experiencia en ser ladrón.
—¿Por qué tienes estas experiencias tan extrañas? —Shen Qianling dijo
sorprendido.
—También tengo que agradecer esto a mi shifu —dijo Qin Shaoyu—. Antes de
retirarse del Jianghu, no solo era un experto en artes marciales, sino también
un aficionado a las hierbas medicinales, así que a menudo nos enviaba a mí y a
mi hermano mayor a robar hierbas de varias sectas.
Shen Qianling estaba avergonzado, «¿cómo podría un lugar como el
Palacio Perseguidor de las Sombras sonar como un lugar que no tenía límites?»
—Vete a dormir —Qin Shaoyu lo abrazó con fuerza—. Es suficiente tener un
pequeño espíritu zorro como tú en esta vida, el resto, que lo tenga quien
quiera.
Shen Qianling: “…”
«Eres tú el zorro».
«¡¿Qué tonterías dices?!»
«Eres realmente molesto».
